Una película romántica que nos narra las sensaciones inversas en la relación que se establece entre una pareja y los símbolos que cada uno particularmente aprecia ante determinados signos.
Tiene la originalidad de contar la historia con continuos flash back, coincidiendo con los recuerdos que el chicho tiene de la relación.
Un joven ejecutivo de la publicidad, tiene la suerte de conocer a una atractiva nueva compañera. Pesea a la opinión inicial del resto de la empresa sobre su mal caracter, consiguen hacer buenas migas, e iniciar un preambulo de relación.
De esa inicial relación amistosa él buscará algo más, mientras que ella siempre mantendrá los límites. Continuamente en la película vemos como las reacciones del chico, tras haber sido abandonado por ella, se fundamentan en hechos del pasado. Pero está visión es parcial y subjetiva. En el repaso de las escenas de su relación ahora ya extinguida, irá detectando otra simbología distinta a la que le ha llevado a un estado depresivo y sensación de aspereza al ser abandonado por la chica.
Sin embargo él sigue enamorado, pensará que la relación con ella siempre va hacia adelante, pero poco a poco irá despertando de su sueño imaginario. Tendrá que comprender que él no es el amor de la vida de ella. Ella ha continuado su camino, manteniendo una simple amistad que para él resulta intolerante.
Sólo recuerda los buenos momento, los momentos felices, pero conforme se aproxima a la realidad deberá reconocer todos los momento, buenos y malos. De esta manera se dará cuenta de los sentimientos de ella que en un principio aparecian totalmente velados por los suyos propios (visión etic).
El final resulta algo sorprendente, pero totalmente acorde con el transcurso del film. Es por ello una película muy recomendable, en cuanto que plantea una relación de forma distinta y poco a poco va desvelando los diferentes puntos de vista de sus protagonistas al tiempo que estos evolucionan.
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