viernes, 2 de abril de 2010

Todos están bien


Un viudo reciente, todavía tiene una imagen paternalista de sus hijos. Los sigue viendo como los niños que fueron.
Tras ser rechazada su invitación a todos los hijos para pasar un fin de semana, decide recorrer el pais hasta encontrarse con todos ellos.
Debido a su delicado estado de salud, tiene que evitar los aviones, de manera que realiza el viaje en autobús y tren.
Al principio admirará su trabajo, que le ha causado la grave enfermedad, pero permite que todo el pais esté comunicado por cable. Sin embargo, conforme encuentra otros puntos de vista sobre la vida, se dará cuenta que es más importante lo que no hizo, y el distanciamiento que permitió entre sus hijos ya no podrá recuperarlo tan fácilmente.
Cuando llega a casa del primero de ellos, se encontrará en la calle y no aparecerá, bajo la puerta le dejará una nota, al igual que hará con el resto para invitarlos a pasar las próximas Navidades.
Cuando llega a casa del siguiente, una hija con éxito laboral como ejecutiva. Notará un extraño ambiente artificial, donde sólo su nieto podrá ser sincero al tiempo que desconocedor de la situaicón.
Se suceden varias llamadas entre los hijos, anunciando los problemas del mayor y la visita del padre. Cuando se encuentra con el tercero. Descubrirá que no es director de orquesta, sino percusionista. Hace lo que le gusta, y se ha alejado de las órdenes que su padre le daba de niño. La cuarta vive en Las Vegas, pero es lesbiana y madre soltera.
En el viaje de regreso sufrirá un ataque. Descubrir la verdad sobre sus hijos, le permite dejar de tratarlo como niños a los que proteger y dirigir en la vida. Descubrirá la muerte del primero de ellos victima de una sobredosis, y logrará recuperar alguna de sus obras artísticas para el recuerdo.
Cambia su relación con sus hijos, y ahora pueden disfrutar de una Navidades juntos y sincerados.

Interesante drama salpicado de situaciones cómicas y graciosas que facilitan muy mucho la visión. Cuando la tragedia ya no puede disfrazarse más, discurren tediosos minutos donde se desvela la situación real. Esa explicación tan "explicita" rompe el interés de la producción y el buen tono hasta ese momento. Tal vez, podría achacarse a la falta de habilidad del director para aprovechar el lenguaje cinematográfico y dejar un poco más reflexiva la cinta. Pero tal vez esto supondría ser una producción más Europea que Americana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu valioso comentario.